El sector exportador quiere recuperar incentivos fiscales y bajada de cotizaciones.

El sector exportador quiere recuperar incentivos fiscales y bajada de cotizaciones.

El sector exportador en un país representa uno de los motores principales de su economía. El mismo requiere de incentivos y medidas que le permitan mantener su competitividad en un mercado global, el cual constantemente se vuelve cada vez más exigente. En este sentido, es crucial establecer políticas que fomenten su crecimiento y le brinden herramientas para enfrentar los retos logísticos, políticos y económicos que se presentan.

Específicamente para el sector exportador español, se considera que es necesario regresar a los incentivos fiscales anteriores que correspondían a la exención del 100% de los dividendos y plusvalías generadas en el exterior. Es decir, se demanda una bajada de cotizaciones para recuperar los incentivos fiscales que se tenían anteriormente.

Estos incentivos fiscales anteriores fueron medidas para reducir los impuestos que gravan a las empresas exportadoras, lo cual les brinda alivio financiero y les permite invertir en mejoras de sus productos, tecnología y expansión. Al disminuir la carga tributaria, se estimula la producción y las exportaciones, generando un impacto positivo en el empleo y el crecimiento económico.

En cuanto a las medidas fiscales, el Club de Exportadores destaca: “la política fiscal supuso en el pasado un muy importante estímulo para la internacionalización de las empresas españolas, y hoy día esa misma política está desincentivando la actividad internacional”.

Los exportadores españoles creen necesario regresar a los incentivos fiscales anteriores, como la reducción de la deducibilidad de la renta negativa procedente de establecimientos permanentes en el extranjero en el propio periodo impositivo, para equipararse a los socios comunitarios, o que se admitan fiscalmente en España facturas de gastos que son legalmente emitidas desde otros países.

Además de los incentivos fiscales, el sector exportador también busca una rebaja de cotizaciones. Estas cotizaciones representan una carga importante para las empresas, ya que tienen que destinar una parte significativa de su presupuesto al pago de contribuciones sociales. Una rebaja en estas cotizaciones permitiría a las empresas exportadoras reducir sus costos laborales y, con ello, mejorar su competitividad en el mercado internacional.

Si se quiere volver a ganar competitividad, se necesitará la reducción de la carga administrativa y burocrática fiscal del sector exportador, para aumentar la seguridad jurídica y se hagan legalmente las inspecciones.

Sin embargo, es fundamental que estas medidas se implementen de manera responsable y sostenible fiscalmente. Es necesario encontrar un equilibrio entre los incentivos y la recaudación, garantizando que los beneficios para el sector exportador no afecten la estabilidad económica ni la calidad de los servicios públicos.

Otro de los problemas, es que la distribución geográfica de las exportaciones está demasiado concentrada en Europa. De las ventas al exterior desde España, un 73% son dirigidas a países europeos. Por ello, es importante y necesario promover el aumento del tamaño de las pymes para que las ventas al exterior desde España vayan hacia otros países. Esto se podría estar consiguiendo con los cambios solicitados. Según los expertos, “el 67% de las exportaciones se concentra durante los últimos 25 años en solo 1.000 empresas.” Con esto aconsejan aumentar la base exportadora española para que las empresas puedan aumentar en tamaño.

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